La razón

Sé que no soy la persona perfecta, y puede que te hayas llevado alguna sorpresa con mi forma de ser. Mi mente recorre sonrisas, lloros, alegrías, llantos, sorpresas, abrazos, miradas…Pero nunca pretendí hacerte esas cosas y siento arrepentimiento por todas esas heridas con mi nombre marcadas en tu piel. Desearía olvidar y borrar todo aquello; y ser yo el que recoja esas lágrimas rodando por tus mejillas. Pero antes de marcharme, de alejarme de todo recuerdo, quiero que sepas que la razón eres tú. Y por eso necesito que escuches que…hay una razón para empezar otra vez de nuevo.  Hay una razón para cambiar como solía ser. Hay una razón para enseñarte una nueva parte de mí. Hay una razón del porque a todo lo que hago. Y esa única razón eres tú.

Pájaros de barro

Por si el viento me arrastra hacia el recuerdo pasado. Yo cierro ya el camino hacia aquellas horas perdidas en el olvido. Y ahora que siento que sopla el viento a mi favor, cojo todo lo que me queda, y con ello, despego mis alas y comienzo a volar.

Aunque no tenga indicaciones de a dónde ir o cómo llegar, yo seguiré adelante.

Todo ese recuerdo ya olvidado, que en su día me hizo daño. Todas esas miradas y caricias que de vez en cuando echo en falta. Sin embargo me detengo para pensar en esos grandes recuerdos, que dentro de poco dejarán de serlo. Recuerdos que acabaron convirtiendo en ríos de lágrimas negras en las que tú ahora mismo te estás ahogando. Lágrimas ya evaporadas que se dirigen hacia el cielo del intenso olvido.

Hoy rechazo el abandono y la pena, que en los vértices del tiempo, se convierten en pájaros de barro. Y aunque sienta que la suerte ya no está de mi lado, y me pierda en la inmensidad del mar, seguiré caminando hacia lo que quiera que me depare la vida. Porque pararse ante el miedo, la frustración; es cosa de débiles, y yo soy una persona fuerte con ganas de avanzar por el sendero de la vida, y llegar a lo que realmente quiero llegar a ser, contigo o sin ti.